sábado, 25 de noviembre de 2017

Expoescuela: Presentación del libro artesanal Mariposas Alborotadas

Tengo el gusto de retomar este blog para compartir el libro artesanal Mariposas Alborotadas, de los alumnos de 1° 3°, turno mañana, del Comercial N° 7, 2017, en el marco de un trayecto de lecturas y producciones cuyo eje temático fue "Trato, maltrato y destrato a nuestros semejantes diferentes".
Este libro se presentó el 17 de noviembre, como una de las muestras del área Comunicación, en el Colegio N° 8 "Julio A. Roca".
El enlace de "Mis libros en Google Play", donde está subido el texto es:
https://play.google.com/books

https://books.google.com.ar/books?id=xcA6HwAAAEAJ&hl=es&num=4

¡Felicitaciones a los chicos que escribieron, diseñaron, ilustraron y armaron este texto; donde desplegaron su talento, creatividad y dedicación!

sábado, 17 de noviembre de 2012

¡Tenemos una verdadera escritora en 1° 1°!

     En cada curso, hay chicos que se destacan por tener una habilidad o un talento especial. Descubrí, en
1° 1°, a  una muy joven escritora, dueña de una honda sensibilidad que refleja con mucho acierto y originalidad en sus producciones: NOELIA ZOPPI.

     El viernes pasado, como lo hicieron sus compañeros, ella seleccionó un cuento, entre varios que distribuí en una mesa. El que eligió es "Un señor muy viejo con unas alas enormes", de Gabriel García Máquez. Después de realizar una actividad de interpretación de este texto, pasamos a la de producción. Debían escribir un relato -podía ser fantástico- que tuviera relación con el tema, o donde expresaran impresiones y sentimientos que les había despertado la historia.
 
    Vale la pena leer el texto que escribió Noelia, por eso lo comparto con ustedes.



    "VALOR"

      Me pesa el dolor de los demás, me aturde y me distrae. No sé cómo seguir. Seguir hacia adelante, seguir intentando. Seguir aprendiendo de cada tropiezo y cada piedra que se interpone en mi camino.

     Tal vez no me entiendan, es que me siento tan solo, sin voluntad, sin fuerzas, sin ganas de nada.
     Me acuerdo de los viejos tiempos, todo era alegría, amor, fiestas, navidades en familia... Recuerdo las risas, el esfuerzo por salir adelante, ese aire con aroma de ganas de vivir.

     Me siento mal, no sólo por mí, por los demás; me llega el fondo de la mirada de cada persona, el sentimiento, el odio, el dolor.

      Lo que no sé es por qué no siento nada positivo. ¿Por qué todo es de color negro? Veo sombras, veo oscuridad, cosas muy desagradables.

    Voy a una iglesia de la ciudad, sumerjo el rostro en el agua bendita y salgo. Es como una necesidad, me siento mucho mejor. Pasan los meses, mi vida está cambiando, voy seguido a la iglesia. Dios me habla, me aconseja.

      Todo ha cambiado: mi vestimenta, mi rostro, mi hogar.  Mi hogar es el cielo, allí nadie se preocupa, todo es tranquilo y disperso. Llevo una manta blanca y unas alpargatas del mismo color…

      Muy pronto me van a dar mis alas, mis hermosas alas, sólo tengo que ser paciente. Todo pasa muy rápido.
 
      ¿Y quién dice que suicidarse es un pecado?

      Ese es mi valor, el valor de animarse a ver qué puede pasar si probamos la verdad de las cosas, el valor de ver más allá.

Noelia Zoppi

lunes, 12 de noviembre de 2012

EXPO-EDUCATIVA 9/11/2012


MUESTRA: ADAPTACIÓN DE LEYENDAS AMERICANAS A HISTORIETAS

AUTORAS Y EXPOSITORAS DE LUJO

Hola a todos:

El viernes pasado, a la mañana se realizó una exposición de muestras de las distintas áreas. El departamento de Lengua y Literatura compartió el aula (1° 4°) con el de Lenguas Extranjeras. Hubo muestras y exposiciones excelentes en esta y en las otras áreas, recibimos las visitas y el reconocimiento de autoridades,    colegas, alumnos y algunos padres, ¡gracias a todos ellos!. Todo se desarrolló en un clima de cordialidad, interés; los chicos estuvieron a la altura de las circunstancias.

Quiero felicitar, especialmente, a las expositoras de 1° 3°, que presentaron la muestra, y explicaron las leyendas y sus producciones (texto y dibujos). Estas adolescentes expusieron con desenvoltura, simpatía, entusiasmo, y demostraron ser muy responsables y aplicadas. ¡Gracias, chicas por su esfuerzo y colaboración!
Ellas son:

- Autora y expositora: Jazmín Pérez. Leyenda americana: "El último guayacán"


EL ÚLTIMO GUAYACÁN

    La vieja payé, anciana hechicera de la tribu, caminaba apesadumbrada entre los árboles de la selva, repitiendo una y otra vez con voz triste y monótona: “El último guayacán morirá; con él desaparecerá un árbol muy querido por los guaycurúes. No se verán más sus flores amarillas. Así lo ha dispuesto Ñandeyará, el genio que habita en estas selvas. El guayacán no volverá a nacer, porque sus flores perecerán irremediablemente, estériles”.
    Los pájaros y los insectos lo observaban curiosos y escuchaban con atención sus palabras. Aleteaban nerviosos y, preocupados, se transmitían la noticia unos a otros.
    Así fue como se enteró una bella mariposa multicolor, una panambí, como la llamaban los guaycurúes. Su delicado rostro se ensombreció. Sus alas de vivos colores se batieron temblorosas, y voló apresurada hacia el lugar donde la última flor del último guayacán se estremecía agitada por la brisa.
   La corola amarilla fue un buen escondite para la panambí. Allí se quedaría; si el guayacán moría, ella lo haría a su lado.
   El sol se ocultó por detrás de las copas de los árboles, y los ruidos de la selva enmudecieron. La quietud de la noche no tardó en llegar.
   Las alas de la panambí quedaron unidas en un abrazo con los pétalos de la flor; fueron las dos un único capullo que aguardaba su destino.
   Pasaron los días, la flor se fue marchitando, y sus pétalos cayeron.
   La dulce panambí se aferró fuertemente al cáliz que se mantenía unido a la rama y allí depositó los huevos que darían nacimiento a nuevas mariposas.
   Después, absorbió el néctar que aquél contenía en su interior y voló hasta un pequeño arbusto, un güembé, llevando en sus patas el polen de la flor. Resignada, esperó su destino.
    Finalmente, en un rojo atardecer, cayó sobre la tierra húmeda, que la recibió como madre amorosa. Con sus débiles patas, cavó un hoyo y, conservando íntegro el germen de la vida, se hundió en él.
   Ñandeyará, trinando de envidia, había observado todo y quedó profundamente conmovido por la generosidad de la panambí. Ella había entregado su vida al último guayacán. Dos lágrimas brotaron de los ojos del genio y cayeron sobre el cuerpecito casi inerte de la mariposa.
   Luego desapareció, envuelto en una densa neblina.
   Sucedió entonces que las patas de la panambí se transformaron en raíces, y de su cuerpo brotaron pequeñas hojas que crecieron y se hicieron un hermoso árbol que, en primavera, se cubrió de flores amarillas, como aquella que había albergado a la mariposa.
   Al mismo tiempo, del cáliz que había quedado sujeto al viejo guayacán, aparecieron una multitud de panambíes recién nacidas que se prendieron de sus ramas y depositaron allí sus huevos. Aquella mariposa, con su generosidad, había impedido que el último guayacán desapareciera de la Tierra.
Desde entonces, las panambíes visitan siempre a los guayacanes y son las que se encargan de depositar en la tierra las semillas que darán origen a un nuevo árbol. Por eso se oye decir que los guayacanes, en lugar de frutos, dan mariposas, o… panambíes.
   ¿Y Ñandeyará? Nada se sabe de él. Lleva un destino errante, vaga meditabundo sobre las copas de los guayacanes; ya no sabe si desea seguir siendo el genio de esa selva.

Versión de una leyenda guaycurú, de Mirta Cassano.







-Autoras y expositoras: Micaela Sierra, Lorena Gaona y Claribel Álvarez. Colaboraron en la producción: Luciana Baglio y Alexandra Sandoval. Leyenda: "La misión del colibrí"



   Cuentan que hace muchísimos años, una terrible sequía se extendió por las tierras de los quechuas. Los líquenes y el musgo se redujeron a polvo, y pronto las plantas más grandes comenzaron a sufrir por la falta de agua. El cielo estaba completamente limpio, no pasaba ni la más mínima nubecita, así que la tierra recibía los rayos del sol sin el alivio de un parche de sombra. Las rocas comenzaban a agrietarse y el aire caliente levantaba remolinos de polvo aquí y allá. Si no llovía pronto, todas las plantas y animales morirían.
   En esa desolación, sólo resistía tenazmente la planta de qantu, que necesita muy poca agua para crecer y florecer en el desierto. Pero hasta ella comenzó a secarse. Y dicen que la planta, al sentir que su vida se evaporaba gota a gota, puso toda su energía en el último pimpollo que le quedaba.
   Durante la noche, se produjo en la flor una metamorfosis mágica. Con las primeras luces del amanecer, agobiante por la falta de rocío, el pimpollo se desprendió del tallo, y en lugar de caer al suelo reseco salió volando, convertido en colibrí.
   Zumbando se dirigió a la cordillera. Pasó sobre la laguna de Wacracocha mirando sediento la superficie de las aguas, pero no se detuvo a beber ni una gota. Siguió volando, cada vez más alto, cada vez más lejos, con sus alas diminutas.
   Su destino era la cumbre del monte donde vivía el dios Waitapallana. Waitapallana se encontraba contemplando el amanecer, cuando olió el perfume de la flor del qantu, su preferida, la que usaba para adornar sus trajes y sus fiestas.
   Pero no había ninguna planta a su alrededor. Sólo vio al pequeño y valiente colibrí, oliendo a qantu, que murió de agotamiento en sus manos luego de pedirle piedad para la tierra agostada.
   Waitapallana miró hacia abajo, y descubrió el daño que la sequía le estaba produciendo a la tierra de los quechuas. Dejó con ternura al colibrí sobre una piedra.
   Triste, no pudo evitar que dos enormes lágrimas de cristal de roca brotaran de sus ojos y cayeran rodando montaña abajo. Todo el mundo se sacudió mientras caían, desprendiendo grandes trozos de montaña.
   Las lágrimas de Waitapallana fueron a caer en el lago Wacracocha, despertando a la serpiente Amarú. Allí, en el fondo del lago, descansaba su cabeza, mientras que su cuerpo imposible se enroscaba en torno a la cordillera por kilómetros y kilómetros.
   Alas tenía, que podían hacer sombra sobre el mundo. Cola de pez tenía, y escamas de todos los colores. Cabeza llameante tenía, con unos ojos cristalinos y un hocico rojo.
   El Amarú salió de su sueño de siglos desperezándose, y el mundo se sacudió. Elevó la cabeza sobre las aguas espumosas de la laguna y extendió las alas, cubriendo de sombras la tierra castigada. El brillo de sus ojos fue mayor que el sol. Su aliento fue una espesa niebla que cubrió los cerros. De su cola de pez se desprendió un copioso granizo. Al sacudir las alas empapadas hizo llover durante días. Y del reflejo de sus escamas multicolores surgió, anunciando la calma, el arco iris.
   Luego volvió a enroscarse en los montes, hundió la luminosa cabeza en el lago, y volvió a dormirse. Pero la misión del colibrí había sido cumplida…
    Los quechuas, aliviados, veían reverdecer su imperio, alimentado por la lluvia, mientras descubrían nuevos cursos de agua, allí donde las sacudidas de Amarú hendieron la tierra. Y cuentan desde entonces, a quien quiera saber, que en las escamas del Amarú están escritas todas las cosas, todos los seres, sus vidas, sus realidades y sus sueños. Y nunca olvidan cómo una pequeña flor del desierto salvó al mundo de la sequía.

 Leyenda Peruana. Recopilación: Enrique Melantoni






lunes, 25 de junio de 2012

Mitos y leyendas

Durante varias clases trabajamos sobre mitos y leyendas. Los chicos investigaron, reconocieron las semejanzas y diferencias entre mitos y leyendas. Buscaron ejemplos de textos mitológicos y legendarios, universales y americanos, los explicaron en el aula y contaron, además, leyendas urbanas que conocían.

Entre diferentes seres (animales) fabulosos de la mitología, les pedí que eligieran uno y recrearan el mito. Comparto algunas de sus producciones:

1) Relatos de alumnos de 1° 3°

-Sobre "El can cerbero":




Lorena Gaona: 
   Cuentan que había una vez un perro de tres cabezas llamado El Can Cerbero y era el monstruo más feo del pueblo. El animal era el encargado de cuidar un  cementerio donde se encontraban sepultados los hombres más ricos del pueblo con su fortuna.
   A la persona que quería entrar con intención de robar la plata, el monstruoso perro la devoraba sin dejar rastros.
   Un día, uno le dejó un pedazo de carne a la entrada para poder ingresar y robar el dinero de un difunto multimillonario. Pero le salió mal, porque el perro se dio cuenta y lo devoró.
   Así pasó muchas veces, pero el perro jamás se descuidó y nunca dejó pasar a nadie, a menos que fuera una buena persona que solo quería visitar a un pariente y no tocar nada del dinero.


Luciana Baglio:
   Cuenta el mito que había un Can Cerbero con el cuerpo y la cola de un león, con cuatro patas y tres cabezas, una mezcla de perro y león. Tenía alas que le salían cuando se enojaba, eran como de águila.
   Cada vez que alguien quería atravesar el camino, la Esfinge, detrás de la roca, les proponía una adivinanza. El que no daba la respuesta adecuada era arrojado al precipicio. Hasta entonces nadie había podido resolver el enigma. Un joven valiente lo descifró, pero igual la Esfinge lo mató. Los dioses del Olimpo lo convirtieron en el monstruoso animal de tres cabezas.
   Por las noches, miraba la luna para aullarle, en especial si había luna llena. Comía cadáveres. Esperaba ver a las personas para atacarlas y comérselas. Cada vez que alguien corría para escapar, él era más rápido y los podía atrapar fácilmente.
   Tenía alas que le servían para volar y solo las usaba cuando se enojaba. Tiraba los cadáveres que devoraba al precipicio para que no se dieran cuenta. Nadie sabía que existía, solo las personas que pasaban por el camino y se murieron.
 
Joaquín Mouzo:
   El Can Cerbero era la mascota de un poderoso dios, hasta que Zeus lo condenó, injustamente, a vigilar la entrada del infierno. Cerbero ero un perro de tres cabezas, con ojos intimidantes, que con solo mirar a alguien lo paralizaba de miedo.
   Con un feroz rugido les decía a aquellos que querían entrar en el infierno: "No entren". Tenía una boca enorme para comerse a sus víctimas de un solo bocado y un corazón lleno de odio hacia Zeus por el inmerecido castigo.
   Pero eso no iba a quedar así, el Cerbero tomaría venganza. Lo haría de la siguiente forma: tendiéndole una trampa en la que el dios caería en un instante. El plan consistía en capturar a la esposa de Zeus, así este iría a rescatarla. Sería una batalla épica que se recordaría por más de millones de años.



2) Relatos sobre Pegaso:






Claribel Álvarez:
   Se cuenta que Zeus caminaba sin rumbo por el Olimpo. A lo largo del día le tocó vivir diferentes situaciones, que nunca hubiese imaginado.

   Una de ellas fue cuando se encontraba con un pequeño caballito torpe y asustadizo, pero muy simpático, al que decidió llamar Pegaso. A partir de ese momento, este fue creciendo junto a Perseo, el hijo de Zeus, y llegaron a hacerse muy buenos amigos.
   Perseo, al ser un semidios, tenía que entrenar para luchar contra el bien y el mal. Pegaso era el que lo transportaba a los distintos lugares del Olimpo y el que lo cuidaba demasiado.
   Con el paso del tiempo, Perseo conoció a una hermosa semidiosa, con la que pronto se casaría y formaría una familia. Así Pegaso pasaría a ser el caballo del hijo de Perseo.

2012: Los nuevos chicos inquietos de 1° 1° y 1° 3°

Este año, lamentablemente, cerraron el 1° 5° y solo dos chicas se pasaron al 1° 3°.  Pero seguimos adelante con nuevos bríos, reanimándonos mutuamente, reinventando nuevos caminos para transitar lo que resta del 2012 con optimismo y fortaleza, procurando transmitir en nuestros alumnos pasión y entusiasmo en cada paso que damos.

Quiero compartir un cuento corto que escribió Gonzalo Sosa, de 1° 1°, motivado por la lectura del cuento "El fantasma", que tanto a él como a sus compañeros les hizo reflexionar sobre la muerte:

"El sueño del pibe"

   Un 22 de julio de 1986, empezó el sueño del pibe que tenía 14 años. El 22 de julio a Fernando lo llamaron para que se fuera a probar a Platense, y él fue. Su jugador preferido era Esteban Fuentes y en el entrenamiento estaban los jugadores de primera. Entre ellos estaba Esteban, Fernando se emocionó y jugó excelente.
   Su director técnico dijo: "Lamentablemente, Esteban falleció el 12 de diciembre del 2000", Fernando tenía 28 años. La felicidad del muchacho llegó cuando lo citaron para jugar en primera. Pero también, la tristeza, porque no estaba su jugador favorito.
   Y a la hora de entrar en la cancha y jugar, apareció el espíritu de Esteban Fuentes y le dijo que no se pusiera nervioso, que jugara como él sabía; que lo iba a ayudar desde arriba, y así fue. Fernando metió tres goles y los festejó con Esteban. "Desde el cielo me ayudó muchísimo Esteban", reconoció y se lo agradeció toda su vida. ¡Siempre!

lunes, 12 de diciembre de 2011

Este es el blogweb de nuestra escuela, visitalo. http://www.com7de10.blogspot.com



Y este de 2° año: http://segundocomercial.blogspot.com.ar

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Y los chicos se animaron a actuar!!

Representación de la obra teatral "Enigma en el laberinto" 

Queremos compartir con los visitantes del blog una buena noticia.

El viernes dos de diciembre, en el acto de fin de año, los chicos de 1° 1ra. representaron la obra "Enigma en el laberinto", ante un público numeroso, en el Gimnasio.
Les recordamos que el guion fue escrito por Luciano Flotta, se trata de una adaptación del texto original de Omar Nicossia.
La puesta en escena fue la culminación de un Proyecto en pareja pedagógica entre las profesoras de Lengua Graciela Torres y Elizabeth Lavanchy.

Los actores fueron:
Elizabeth Lavanchy: Hiperfeus.
Luciano Flotta: Épiko.
Federico Schemberger: Rey Óptimo.
Brigitt Loayza: Reina.
Nadia Schemberger: Princesa Mimoxa.
Fulanito: Facundo Pieka.
Menganito: Maricel Fernández.

Ambas profesoras consideramos un logro importante el haber podido concretar en su totalidad este proyecto. Valoramos mucho y nos sentimos gratificadas porque los chicos se aprendieron el guion, se animaron a actuar ante tanta gente, a pesar del cansancio, del calor en esta época del años y de algunos inconvenientes como el audio. Todos actuaron muy bien para ser principiantes. Destacamos también en ellos valores, como la responsabilidad, el compromiso y la solidaridad. Sentimos que fue un trabajo en equipo entre las docentes y sus alumnos; que hubo una conexión especial con la obra y entre los personajes; que interactuaron excelente Luciano y Elizabeth en cuanto al diálogo, a sus miradas y gestos.
Agradecemos, finalmente, la colaboración de Gabriela y de Pablo, profesores de Plástica y de Música, respectivamente.

A continuación, les mostramos algunas fotos: